¿Compra inocente o problema límite? Viajar con un ‘Wirkin’

Imagine a una madre estadounidense que recoge los artículos necesarios en su Walmart local y, antes de pagar, revisa los bolsos, tal vez en busca de un pañal o una bolsa de trabajo. Ella ve lo que llaman Wirkin, piensa: “Caramba, qué bonito” y lo compra. Ahora bien, digamos que nunca ha oído hablar de Hermès o Birkin, por lo que para ella esta es simplemente una opción moderna y asequible. No está tratando de “superar” a las compañías de lujo, ni imitar a una celebridad, ni hacer una declaración sobre el valor, ni aceptar la llamada cultura del engaño. Es simplemente un bonito bolso.